Arequipa y Perdidos en el Cañón del Colca

La hermosa ciudad blanca de Arequipa, a la sombra de los volcanes Misti y Chachani, es quizá tan linda como Cusco y algo menos turística. Tiene muchas actividades como para pasar varios días, y si a caso nos aburrimos por que no tomar un tour hacia alguno de los atractivos naturales cercanos, como los volcanes o el inmenso Cañón del Colca. También es ideal para mi programa Nro 1, caminar tranqui por ahí tomando unos mates y meter una buena noche de Pisco.

Plaza de Armas, Arequipa
Plaza de Armas, Arequipa

Durante nuestra estadía la pasamos haciendo algo de lo que la ciudad tiene para ofrecer. Una de las visitas mas conocidas es el monasterio de Santa Catalina, un antiguo convento en el centro de la ciudad con buena historia, muy bien restaurado y pintado con múltiples colores en tonos fuertes. Vale la pena verlo una vez ya que es lindo pero también un poco caro para el bolsillo del mochilero. Otra atracción de la ciudad, el Museo de la Juanita, es totalmente recomendable. Allí se exhiben unas momias-niñas sacrificio de los Incas en los volcanes cercanos a Arequipa así como muchas otras reliquias de esa época (buen descuento con tarjeta de estudiante).

También tomamos un city-tour en un bus doble piso, esta bueno ya que se visitan puntos alejados del centro como un par de miradores al volcán, una textil de lana de alpaca, una finca de no se quien famoso entre otras cosas. Para tomar el tour es tan fácil como caminar por la plaza de armas y esperar a ser abordado por locales con ofertas «inigualables» (es buena ir un ratito antes de que salga para conseguir precios muy baratos).

La movida nocturna es también bastante abundante y vale la pena, hay un par de «party hostels» con bares a los que se puede ir (aunque no estemos alojados en el) y muchos bares/discos para sacudir los mondongos, este tema la verdad que conviene averiguar una vez allí ya que es muy variado.

NP_PeruBolivia2012-591
Volcanes Chachani (izq.) y Misti (der.), siempre visibles desde Arequipa

Hacia el Cañon del Colca

Luego de unos días de descanso y y alguna que otra salidita nocturna hasta la madrugada el cuerpo pedía aire nuevamente por lo que decidimos poner rumbo al famoso Cañon del Colca. Para esto nos tomamos un taxi de nuestro hostel («Flying Dog», muy recomendado) a la terminal terrestre para de ahí tomar un bus al mencionado cañon. El destino final del bus era el pueblo de Cabanaconde y la idea era descender por uno de los tantos caminos hacia el Oasis de Sangalle, que es donde pasaríamos la noche. De todas formas, nos bajamos media hora antes de llegar al pueblo en el Mirador Cruz Del Cóndor de donde se pueden ver bastante bien estos bichos. Llegamos al mirador a eso de las 6 AM junto con el amanecer.

Los cóndores viven y anidan con sus condoritos sobre las paredes inaccesibles del cañón allá abajo y todas las mañanas, cuando el sol empieza a calentar usan las térmicas (corrientes de aire ascendentes) para subir casi sin esfuerzo y salir del cañón. Pertenecen a la misma familia que los buitres por lo que son carroñeros, no depredadores y son bastante impresionantes. Personalmente lo que más me llama la atención es el ancho de las alas, mucho más que el resto de las aves, además son inmensos. Por su naturaleza es que casi los limpian por completo hace unos años (son de atacar a las crías de ovejas, llamas y ainda mais enseguida que nacen) y se salvaron gracias a bruto plan de conservación con gran componente tecnológica ya que hoy en día los ejemplares que son criados en cautiverio y liberados son monitoreados por satélite.

Su principal enemigo es el Pepe Cortisona también conocido como Saco de Plomo, PLOP!

La muchedumbre admirando los Cóndores
La muchedumbre admirando los Cóndores

Los cóndores arrancan a subir de a poco, a las 7 AM divisamos los primeros allá abajo y desde las 7.30 a 9 van saliendo de a poco hasta que llega un momento que te pasan a dos metros sobre la cabeza y hasta a veces se paran en una piedra saliente que hay, como si estuvieran adiestrados (vaya a saber si no hay un Peruano astuto allá abajo…).

A eso de las 8 AM cae una plétora de turistas que colman por completo la zona, si tengo que tirar un número diría que entre 100 o 200 y caen todos de golpe con más cámaras de fotos que manos y unos zooms telefoto que aumentan unas 400 o 500 veces.

El Cóndor Andino, Cañón del Colca, Perú
El Cóndor Andino, Cañón del Colca, Perú

A las 9 AM vimos que se aproximaba nuestro bus por lo que lo paramos y partimos hacia Cabanaconde donde compramos unos sanguches para almorzar (en el hostel Pachamama), procuramos info y partimos el descenso del Cañón.

Esa parte del cañón está con orientación Este-Oeste y básicamente hay tres caminos para hacer y todos terminan en el Oasis de Sangalle, el más fácil y común baja derecho al Oasis que está al lado de Cabanaconde pero abajo del cañón (3-4 horas de duración), otro arranca para la derecha, adentrándose en el cañón pero pasando por varios pueblitos y es más largo (6 horas a buen ritmo) y el otro lo mismo pero sale para la izquierda, visitando otros pueblitos y con opción a una catarata que parece está buena.

A excepción del camino que va derecho al oasis, los otros dos nos recomendaron que los hiciéramos con un guía y que se haga en dos días, quedando una noche en un pueblito. No hicimos ni una cosa ni la otra ya que preferíamos hacerlo solos ya que el camino no es técnico y no queríamos pagar más (ya habíamos pagado 40 soles por entrar al cañón, y eso por ser latinos sino era 80).

Inicio del descenso al cañón
Inicio del descenso al cañón

Arrancamos a caminar desde Cabanaconde casi sobre el mediodía por lo que estimamos llegaríamos al oasis de tardecita. Un detalle importante es que debido a la inmensa profundidad del cañón (el doble de profundo que el cañón del Colorado), cuando estás abajo a las 4 PM ya no da el sol, hay luz si pero no sol directo. La caminata pasa obligatoriamente por el pueblito de San Juan de Chuccho y de ahí el camino se complica un poco. Hay dos opciones, uno que va por «arriba» y otro que va por «abajo», más cerca del río. El más fácil es agarrar por «arriba» pasando por los pueblitos de Cosñirua y Malata, ahí no hay forma de perderse. Nosotros agarramos por «abajo» y le pifiamos, mal.

Cuando hablás con la gente (guías o pueblerinos que te cruzás) te indican el camino pero cuando lo recorrés te das cuenta que hay MUCHAS posibilidades y encrucijadas similares y a pesar de que te cobran una importante entrada, no hay nada señalizado. En algunos lugares hay unas cintitas azules atadas a ramas de árboles pero la mayoría están desparramadas por el piso asi que no se sabe si te están indicando el camino o no. Lo otro que nos pasó fue que en una encrucijada importante, le preguntamos a un guía que estaba ahí que camino era el correcto y no solo no quiso decir nada el muy hdp sino que vio que íbamos por mal camino y nos dejó ir, y eso que eran ya casi las 4 de la tarde. Terrible mala leche.

NP_PeruBolivia2012-565
Obra escolar en San Juan De Chuccho
NP_PeruBolivia2012-564
Pileta, San Juan De Chuccho

Arrancamos a caminar bajando cada vez más y el camino, si bien seguía siendo camino se iba haciendo menos camino hasta que en un momento, ya a unos 100 metros del río (bastante profundo en el cañón) el sendero se terminó de golpe. Desde arriba habíamos visto que el oasis no estaba tan lejos de donde estábamos por lo que decidimos jugarnosla a bajar hasta el río y llegar por ahí, aunque no había sendero. El problema fue que el río, a quizá unos 700 metros antes de llegar al oasis se encajona entre murallones de piedra altísimos y no hay forma de cruzarlo a menos que te tires al agua y como sentíamos un ruido importante como de catarata del otro lado, quedó descartado. Ahí empezamos a tratar de ganar altura para tratar de pasar por arriba de esos murallones pero era muy empinado y se desmoronaban las piedras todo el tiempo, se volvió bastante peligroso y tuvimos que regresar de vuelta al río. Para ese entonces nuestra situación era ligeramente preocupante ya que desconocíamos la temperatura a la intemperie de noche y de quedarnos ahí la cosa se podría complicar en serio. La escasez de agua y comida no era importante ya que teníamos el río y podíamos pasar una noche sin morfi pero el tema de la temperatura era otra cosa.

Decidimos intentar subir de nuevo para regresar a San Juan de Chuccho pero no podíamos salir del río, todas las paredes que intentábamos se desmoronaban, las piedras cayendo y todos los arbustos, cañas o chilcaje del que tratábamos de agárranos estaban resecos y no aguantaban. Por allá en un último intento vimos unos árboles a unos 100 metros más arriba y decidimos ir en esa dirección sin importar lo que hubiera en el medio. Atravesamos a lo bruto un bosque de tunas y un cañaveral y finalmente llegamos a los arboles, cosa que fue una buena decisión ya que divisamos una especie de camino y vimos un par de burros que habíamos visto en la bajada. Nos costó muchos rayones, lastimaduras y tintes (ahí conocimos por las malas la «chinchilla» que la gente usa para teñir ropa) pero llegamos al camino por el cual emprendimos la vuelta. En eso nos topamos con un arriero, que iba a buscar los burros, y como nos dijo que estábamos a la misma distancia de San Juan que del oasis, le tiramos unos soles para que nos indique el camino y poder así llegar al destino deseado. Ahí vimos donde le habíamos errado, en una encrucijada a 5 metros de donde le habíamos preguntado al guía, lo detesté a el y a toda su prole. Llegamos al oasis a eso de las 8 pm, en noche cerrada, nos hospedamos en el 2do hostel que vimos y nos bajamos 2 litros de agua al toque.

Oasis de Sangalle, Cañón del Colca, Perú
Oasis de Sangalle, Cañón del Colca, Perú

El oasis de Sangalle es bien eso, un oasis en el fondo del cañón, solía ser una granja de naranjas pero ahora está totalmente ocupada por hostels. Yo me imaginaba que iba a ser similar a aguas calientes pero no, los hostels son predios que tienen cabañitas desparramadas por ahí y todos tienen piscinas y a pesar que tienen todas las comodidades, son bastante agrestes digamos, está muy bueno. Muy recomendable ir al río a bañarse.

DATO: el agua abajo sale 12 soles, arriba 3!

De ahí subimos directo a Cabanaconde y partimos a Chivay, otro pueblo sobre el cañón que tiene aguas termales donde hicimos noche y baños termales al otro día, prolijo el pueblito.

Ica, Huacachina y Lima otra vez  >>

<< La Paz y Rurrenabaque, del Altiplano a la Selva

Hola!